Las familias son tan variadas como regalitos pueden salir en tu roscón, pero, aun así, la tradición de consumir este rico bollo siempre está presente en cualquier hogar, y ya seas de tomarlo en la noche del 5 de enero o en la mañana del 6, esta receta será perfecta para disfrutar de este rico dulce casero con los tuyos.
Desde hace un tiempo y cada vez más, los precios de los roscones de Reyes se ven disparatados cada Navidad, hasta el punto de no solo tener que pagar altos precios sino también, realizar largas colas en la confitería en la que desees adquirirlo.
Por ello, en este post te dejamos el secreto de su sabor, para que puedas disfrutar de esta noche tan especial con los tuyos mientras acompañas tu pequeña creación de un buen chocolate caliente.
Rellenos de nata, trufa, tu crema favorita o solos, son múltiples y variadas las recetas que encontramos, pero no solo son rellenados de sabrosas y deliciosas cremas dulces, sino que, además, están repletos de regalos en su interior.
Esta antigua tradición comenzó hace siglos en la civilización romana, donde en las fiestas “Las Saturnales”, compartían este dulce en honor a Saturno, Dios de la agricultura.
Las Saturnales, se celebraban el Templo de Saturno y suponía uno de los mejores días para los esclavos de la antigua Roma, pues el ambiente carnaveleño, figuraba e implicaba la relajación de las normas sociales.
Fue a partir del siglo IV, cuando pasó a ser una fiesta cristiana en todo Occidente, pues la Iglesia institucionalizó el día de Reyes. Y aunque cada vez, la tradición dice ir perdiéndose entre muchas familias, somos muchos los que todavía la conservamos, aunque solo sea por degustar este delicioso bollo junto a nuestra bebida caliente favorita.
Pero no solo consumimos este típico roscón en España, sino que, en otros países como Francia, Portugal o México, tienen también costumbre de compartir recetas similares a este dulce.
A continuación, veremos cómo cambian las tradiciones con el paso del tiempo y como, algunas figuras como el haba, han cambiado totalmente su significado en el día de hoy.
Son muchos los detalles y figuras que podemos encontrar dentro de nuestro roscón, pero solo algunos son indispensables. Este es el caso del haba, la cual no es más que una pequeña figura, que suele ser de tonalidad marrón y forma ovalada, y que conlleva y acarrea la incertidumbre y vacilación en el momento de comernos este fantástico dulce por todos los miembros que estén alrededor de la mesa.
Pero esto no siempre ha sido así, pues como hemos comentado con anterioridad, se trata de una tradición que se remonta a una festividad romana, pero las tradiciones siempre avanzan y evolucionan y a veces incluso, se les da la vuelta con el paso de los años.
Por aquellos tiempos, dado que se trataba de una “fiesta de los esclavos”, quien encontraba el haba, quedaba libre por ese día y era tratado como un rey, resultando ser el vencedor de la ocasión.
Con el paso de los años, esto se ha visto modificado hasta el punto de que hoy, quien encuentra esta pequeña figura, resulta ser el “desdichado”, pues debe pagar el precio del roscón como sanción.
Hacer tu propio roscón te llenará de satisfacción y con esta receta, conseguirás un bollo jugoso, esponjoso y listo para compartir con familiares y amigos. Eso sí, tras su realización, lo único que necesitarás será hacerte con una corona para el rey de la noche.
250 g de harina de fuerza ⚫ 25 ml de leche ⚫ 60 g de mantequilla ⚫ 20 g de levadura ⚫ 60 g de azúcar ⚫ 1 huevo ⚫ 25 ml de agua ⚫ Una pizca de sal ⚫ 1 cucharadas de agua de azahar ⚫ Ralladura de limón y naranja
Bien si eres fan de los coloridos roscones tradicionales o bien si prefieres innovar y crear un dulce personalizado, te dejamos varias opciones con las que triunfarás en esta noche tan especial.
Como todos sabemos, encontrar fruta escarchada y azúcar en la superficie de nuestro roscón es lo más común, pero es bien cierto que antes de llevárnoslo a la boca, la mayoría solemos retirar estos trocitos de fruta, por lo que podremos barajar otras opciones con las que decorar nuestro roscón y encontrar aquella que gustará a todos.
Una de nuestras coberturas favoritas es la de láminas de almendras tostadas, pues es sencillo, rico y encanta tanto a mayores como a pequeños. Además, al mojar nuestro bollo en el chocolate caliente, forma ese delicioso sabor que no resulta tan empachoso.
Por último, y únicamente para los más golosos, podremos recubrir nuestro roscón con chocolate caliente fundido, blanco, negro o con leche, ¡elige tu favorito y deja que se enfríe! Y si aún con esto, no tiene suficiente, recubre con ricos toppings como trocitos de oreo.
Además de elegir múltiples y variados regalitos, podremos decidir si queremos rellenar nuestro roscón con alguna crema sabrosa como nata o chocolate. Pero, por si eres de los más golosos, te dejamos diferentes opciones para que, al terminar tu roscón, elijas tu preferida y puedas cortarlo y añadirla, pues no querrás dejar pasar la oportunidad de rellenarlo:
Si lo prefieres sin rellenar, ¡no será necesario este paso! Y podrás centrar toda tu atención en elegir los regalos al detalle y cuidadosamente.