Cómo elegir el frigorífico perfecto para tu segunda vivienda

Un frigorífico es elemento imprescindible que no puede faltar en una cocina, es el pilar de la misma, donde se conservan los alimentos, en alguno casos podemos disponer de una segunda vivienda en la que optamos por tener un frigorífico más sencillo, que cumpla con las necesidades básicas de tu segundo hogar, pero, ¿Cómo elegir el adecuado?

¿Qué tengo tener claro antes de empezar a buscar un frigorífico?

Lo primero es preguntarte qué necesidades hay en tu segunda casa, ¿le das mucho uso a la vivienda? ¿la utilizas poco? ¿sueles tener mucha comida? ¿cuántas personas lo van a utilizar?, a raíz de estas cuestiones puedes tener más claro que clase de frigorífico puedes necesitar.

Al tratarse de una segunda residencia, puede que un frigorífico sencillo y económico cubra bien tus necesidades, ya que seguramente le vayas a dar menos uso que al refrigerador de tu vivienda principal, así que vamos a darte varias opciones para que puedas decidirte sin problema.

Frigoríficos de doble puerta, sencillos y económicos

Los frigoríficos de doble puerta son los más sencillos y óptimos que podemos encontrar. Cuentan con un sistema que abarca el enfriamiento de los dos compartimentos del electrodoméstico y normalmente tienen el frigorífico en la parte inferior y el congelador en la parte superior, siendo el congelador más pequeño que en los frigoríficos combi.

Las dimensiones de este refrigerador son inferiores a las de un frigorífico combi y ocupan menos espacio. Las prestaciones de este dispositivo son limitadas y están expresamente pensados para segundas viviendas, cocinas y estancias pequeñas. Perfecto para cubrir necesidades y prestaciones básicas.

Los precios pueden oscilar entre 180 y 280€.

Frigoríficos combi, la opción más completa

Los frigoríficos de tipo combi tienen dos compartimentos, uno para enfriar y otro de igual capacidad para congelar, normalmente el recipiente para enfriar se suele colocar arriba y el de congelar abajo. El de congelar suele tener cajones espaciosos para ordenar y clasificar todos los alimentos.

Por eso se llama combi, por la combinación equivalente de los dos departamentos. Normalmente enfrían y congelan mejor, ya que son más potentes. Estos frigoríficos son más potentes y tienen más capacidad de almacenaje en volumen útil. Sí utilizamos mucho el congelador esta es la mejor opción.

Este tipo de frigoríficos oscilan económicamente entre los 350 y los 800€. Una apuesta segura en cuanto a prestaciones y calidad.

Frigoríficos americanos, amplitud de cine

Los frigoríficos americanos son perfectos si te vas a pasar el verano a tu segunda vivienda y quieres despreocuparte de hacer la compra cada semana. Gracias a su gran amplitud y capacidad, estos frigoríficos te permiten almacenar gran cantidad de productos, tanto en su refrigerador como en el congelador.

Los precios de estos modelos suelen oscilar entre 700 y 1.500€.

Y pese a que no es la opción más económica para una segunda vivienda, su precio se traduce en bienestar y comodidad, pues están optimizados para conservar tus productos en perfecto estado durante más tiempo.

Frigorífico bajo encimera

El frigorífico bajo encimera también es una gran alternativa para nuestra segunda residencia, puede servir como frigorífico auxiliar o frigorífico principal para esa estancia a la que no vamos muy a menudo. Estos frigoríficos tienen una buena capacidad (80 litros) y son muy fáciles de colocar en nuestra cocina ya que prácticamente caben en cualquier lugar. Tienen una puerta reversible para que aun nos resulte más fácil buscar su lugar en la cocina, y el consumo inmejorable, eficiencia energética A+.

¿Qué prestaciones tengo que tener en cuenta para comprar un frigorífico?

Esto depende de tus necesidades, pero de manera general en cualquier frigorífico que decidamos comprar deberíamos tener en cuenta:

• Las dimensiones, para que encaje correctamente en el espacio de nuestra cocina
• Consumo energético. Como mínimo debería ser un A+, además de consumir menos, son mucho más respetuosos con el medio ambiente.
• El frigorífico y el congelador tienen temperaturas diferentes, el congelador enfría mucho más hasta congelar y el frigorífico mantiene una temperatura fría y constante. Cada compartimento debe tener su propio termostato para poder regularlas de manera óptima.
• Que sea no frost es básico para que no produzca hielo ni escarcha, esto hará que el mantenimiento del frigorífico sea mucho más sencillo y llevadero.
• Antes de comprar, compara precios y prestaciones, realiza una cabeza con compra para estar seguro de lo que compras según lo que necesitas.

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